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¡GRACIAS POR TODO, APRECIADO EDGARDO! (Q.E.P.D.)

Conmovidos estamos en la Municipalidad, impactados por la temprana partida de este mundo de un funcionario de excelencia, don Edgardo Jarpa Maldonado, nuestro querido “Jarpita”. Falleció este viernes 13 de octubre, tras sufrir el lunes pasado un severo accidente cerebro-vascular. La familia municipal llora, con sinceridad y dolor, a quien desplegó su talento profesional junto a nosotros, desde su ingreso al Municipio en marzo del 2014. Cabrerino de familia y de corazón, estudió en el colegio San José, en el Instituto Superior de Comercio de Concepción, en la especialidad de Administración de Inventario; y en la Universidad del Biobío, en la carrera de contador público y auditor. Por sus antecedentes educacionales y porque era su vocación, siempre estuvo unido a tareas propias de nuestra Dirección de Administración y Finanzas, en las unidades de Pago de Facturas, Activos Fijos, Bodega y Patentes.

Su dedicación era plena, así como su compromiso laboral y su lealtad a la gestión municipal, lo que no impedía que desplegara su vitalidad en otros ámbitos comunitarios, como el deporte. Nunca olvidaremos que asumió como tesorero en la directiva del club Comunal Cabrero, nacido justamente bajo el alero del Municipio, responsable de esa ardua tarea que debía afrontar esta naciente institución futbolística. En la vida laboral cotidiana, fue siempre un profesional comprometido con todo lo que diera vitalidad a la familia municipal, participando con entusiasmo en tantos eventos, en los que colaboraba en todo lo que fuera necesario, aunque nada tuviera que ver con su profesión y cargo dentro de la Municipalidad. Lo recordamos ahora en su participación en la gran Cabalgata Familiar y en la Peña La Monteaguilina, donde le vimos, como siempre, activo, dispuesto y entusiasta. Su simpatía y amabilidad, su inolvidable sonrisa, su alegría vital, su optimismo total y su empuje contagioso son marcas indelebles que deja en nuestras mentes y nuestros corazones, porque donde estaba “Jarpita”, siempre había una actitud positiva.

Como servidores públicos y también los colaboradores de este Municipio, entregamos nuestras públicas condolencias a todos los integrantes de su familia, desde sus padres hasta sus hijos, pues compartimos este tremendo dolor por una partida tan prematura y sorpresiva. Nos deja en lo físico, pero queda con nosotros el magnífico recuerdo de haber compartido tantas jornadas con él, con el verdadero valor del compromiso con sus colegas, su trabajo y su servicio efectivo a la comunidad. Nuestras lágrimas serán nuestro sincero homenaje a tan digno funcionario municipal, un ciudadano ejemplar que nunca olvidaremos.

¡Estimado “Jarpita”, sabemos que Dios te acoge, pues lo mereces! ¡Querido Edgardo Jarpa Maldonado, descansa en paz!